Los accidentes de tránsito continúan ocupando muy altas cifras en República Dominicana, con un promedio de mortalidad de 17.30 por cada 100,000 habitantes. Los días en que ocurren más fallecimientos por este tipo de incidentes son los domingos, seguidos de los lunes y los sábados.
Esas fechas coinciden con un mayor incremento en horario nocturno, o sea, entre 6:00 de la tarde y 11:59 de la noche. En el período enero-junio de este 2022, las provincias que presentan defunciones alarmantes, respecto a su población, se encuentran: Samaná (25), La Altagracia (23), Monseñor Nouel (21) y Monte Cristi (19) pérdidas de vidas por esta causa.
Los datos se desprenden del segundo informe realizado por el Observatorio de Salud y Bienestar Social del Círculo de Cultura Democrática. De acuerdo con lo recabado, desde el 2016 hasta junio de este año, suceden alrededor 1,784 muertes al año por accidentes de tránsito. Las víctimas fatales de mayor frecuencia son los conductores de motocicletas, ocupando el 68% de lo contabilizado en este 2022.
De los primeros seis meses de este 2022, enero es el de mayor tasa de fallecimientos, con un 21%, contabilizando 184 pérdidas; le sigue mayo, en el que perecieron 169 personas, de acuerdo con las cifras dadas a conocer por el Observatorio del Círculo de Cultura Democrática, a través de la recolección y análisis de informaciones de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Dogesett) y la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), solicitados mediante el Portal Único de Solicitud de Acceso a la Información Pública (SAIP).
Dicho reporte, también establece que las tres principales causas de defunciones por accidentes de tránsito en el país, de enero a junio de 2022, corresponden en un 59% a colisiones, un 20% a deslizamientos y un 15% por atropellamientos. Los hombres están en el primer lugar en cuanto a los decesos, sumando en el primer semestre 779, en comparación con las 99 mujeres que perecieron por la misma causa.
Caminos peligrosos
Además de las rutas que conectan con parajes, municipios o provincias, las carreteras, calles, avenidas, autopistas y autovías también se han convertido en un camino de sangre, pues desde mediados del 2018 al pasado mes de junio, el 94% de las defunciones ocurren en esos espacios. De ese porcentaje, un 41 sucede en carreteras.
En ese sentido, Zoraima Cuello, presidenta Fundación del Círculo de Cultura Democrática, explica que es urgente que en el país se implementen medidas para el abordaje de la seguridad vial y que la problemática forme parte prioritaria de la agenda nacional, pues además de las pérdidas humanas, cientos de personas quedan incapacitadas, lo que supone una mayor carga económica para sus familias y para el sistema general de salud en general. De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que los traumatismos, la discapacidad y las terapias posaccidentes de tránsito generan un gasto en el Estado del 3% del Producto Interno Bruto (PBI).
“El Gobierno dominicano debe adoptar medidas para mejorar la seguridad de las vías con acciones que vinculen y comprometan la ciudadanía, los vehículos y los usuarios, prestando especial atención a las carreteras, donde ocurren la mayor cantidad de incidentes y para ello, debe trabajarse de manera conjunta con todos los actores involucrados”, agregó Cuello.
También, optimizar las infraestructuras que permitan transitar de forma segura, verificar el cumplimiento de las medidas de seguridad de los vehículos y garantizar el cumplimiento de las normas de tránsito, con miras a alcanzar las metas 3.6 y 11.2 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).