Los Oklahoma City Thunder y los Indiana Pacers. Ilustración: Pedro Ramirez.
EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El Thunder de Oklahoma y los Pacers de Indiana inician este jueves un enfrentamiento nunca antes visto en la final de la NBA, donde estos equipos se apegarán a la calidad de su estilo de juego para ser el último equipo de pie cuando termine esta serie, que se disputará al mejor de siete encuentros.
Aunque el Thunder heredó el título conseguido por los Seattle SuperSonics (1979), desde que llegó a Oklahoma esta es su segunda final, junto a la de 2012, mientras que los Pacers, quienes arribaron a esta instancia por última vez en el 2000, ambos clubes se han quedado cortos en la búsqueda de su primer título de campeones.
Un recorrido diferente
Los de OKC fueron el mejor equipo de la serie regular y se encargaron de demostrar eso en los playoffs para llegar a esta instancia como el mejor club de la Conferencia del Oeste, mientras que los Pacers fueron mostrando su crecimiento a lo largo de la contienda, superando a rivales como los Bucks, los Cavaliers, quienes fueron los de mejor registro en el Este y a los Knicks, quienes quedaron justo delante de ellos en la tabla de posiciones.
OKC se mantendrá apegado a su estilo
El Thunder fundamentó su dominio en su estilo de juego rápido, con una asfixiante defensa y un ataque donde su principal referente fue el ganador del premio al Jugador Más Valioso de la temporada, Shai Gilgeous-Alexander, quien indicó que continuarán apegados a este plan, el cual los ha llevado hasta la final.
«Ser fieles a quienes somos es la razón por la que estamos aquí. Nos haríamos un flaco favor si intentamos cambiar o ser algo que no somos. Si queremos seguir teniendo éxito, debemos seguir siendo nosotros mismos, de forma natural», precisó el canadiense en declaraciones recogidas por la agencia EFE.
Si bien Shai es el estandarte en el que se apoyan para liderar su ataque, la realidad es que su estilo los lleva a utilizar de manera constante a los demás jugadores que forman parte de plantilla y eso es algo que todos tienen claro y que pondrán en práctica en el tabloncillo.
«Siento que en este equipo somos 17 ganadores que ponemos la victoria por encima de todo lo demás», dijo Chet Holmgren, quien junto a Shai y Jalen Williams, forma parte de ese eje central alrededor del que se mueven las demás piezas del Thunder.
Motivados los subestimados
Marcados por el sello de contar con un líder catalogado como “sobrevalorado” por los demás jugadores de la liga, los Pacers han dejado detrás cada una de las voces que no los colocaban como favoritos para ser los representantes del Este en la final de la NBA, utilizando esa valoración como combustible.
“Toda duda sobre mí es buena, me encanta escuchar esas cosas (críticas)», dijo Tyrese Haliburton al respecto.
Los Pacers han tenido que superar esas condiciones, a las que nuevamente se enfrentan en una serie en la que no son favoritos, pero en la que al igual que en el camino que han recorrido, seguirán haciéndose grandes para conseguir la victoria, como lo explicó de manera personal Paskal Siakam, MVP de la final de conferencia en el Este.
«Pasé por muchos momentos duros, aprendí de las adversidades. No siempre fue fácil y eso me hizo lo que soy. Pasé por todo como jugador, muchos altibajos que hacen el viaje más dulce. Me hacen apreciar todo aún más y jugar más libre», explicó Siakam sobre ese sentimiento que recorre por las venas de sus compañeros.
Durante la temporada el Thunder ganó los dos partidos en los que se enfrentaron e intentarán que ese resultado los acompañe en esta final, mientras Indiana luchará por cambiar esa historia.
Relacionado