EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- Osvaldo Virgil siempre será recordado como el primer pelotero dominicano en debutar en las Grandes Ligas. La hazaña se produjo el 23 de septiembre de 1956.
“Este 23 de septiembre se conmemora un hecho histórico para el pueblo dominicano con la llegada del primer dominicano en debutar en Grandes Ligas. Virgil siempre lo vamos a recordar como el pionero que abrió las puertas a más de 900 peloteros que han puesto en alto la bandera nacional”, expresó el expelotero Junior Noboa, Comisionado Nacional de Béisbol.
“La Dirección del Comisionado de Béisbol, en lo personal que jugué en Grandes Ligas y los casi mil peloteros que han pisado un terreno de Grandes Ligas siempre vamos a resaltar su impronta y proeza, al abrirle las puertas a todos nosotros”, resalta una nota de prensa de la Dirección del Comisionado.
“Honremos a Virgil hoy, mañana y siempre. Gracias Don Osvaldo por ser el pionero, por ser un ejemplo para nuestro país, un estímulo para los jóvenes. Estas salutaciones van también de la mano de nuestro presidente Luis Abinader Corona”, destaca Noboa.
Cabe señalar que en 2021 el Senado de la República aprobó el 23 de septiembre como “Día Nacional del Pelotero” en honor a Osvaldo Virgil.
Osvaldo José Virgil Pichardo, mejor conocido como Ozzie Virgil (nacido el 17 de mayo de 1932 en Montecristi), es un expelotero que jugó en las Grandes Ligas entre 1956 y 1969 para New York Giants (1956-57), Detroit Tigers (1958, 1960-61), Kansas City Athletics (1961), Baltimore Orioles (1962), Pittsburgh Pirates (1965) y San Francisco Giants (1966, 1969). Aunque se desempeñaba mejor como tercera base, Virgil jugó todas las posiciones, excepto las de lanzador y jardinero central.
Durante toda su carrera en las mayores, Ozzie tuvo promedio de bateo de .231 con 14 jonrones y 73 carreras impulsadas en 324 partidos jugados.
Después de que su carrera como beisbolista terminó, Ozzie pasó 19 temporadas como preparador de San Francisco Giants (1969-72, 1974-75), Montreal Expos (1976-81), San Diego Padres (1982-85), y Seattle Mariners (1986-88). De 1977 a 1988, se desempeñó como preparador de tercera base junto al Salón de la Fama y exmanager, Dick Williams.
Su primer hit en las Grandes Ligas lo conectó siete días después de su debut en un partido contra los Phillies de Philadelphia, conectando doble y dos sencillos contra Robin Roberts.
En 1984 se convirtió en el primer dominicano en dirigir en las Grandes Ligas de forma interina, como mánager de los Padres de San Diego. En el béisbol dominicano, fue líder de bateo en la temporada 56/57, con promedio de .312, jugando con los Leones del Escogido, uno de los tres equipos que dirigió en el país (Águilas y Toros del Este).
También llevó su sapiencia al béisbol de Venezuela, dirigiendo a los Tigres de Aragua, Tiburones de la Guaira y los Cardenales de Lara. Es considerado una gloria deportiva.
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