Brayan Bello.
EL NUEVO DIARIO, MIAMI — Hay algo que decir acerca de tomarse el tiempo y el espacio para recalibrar. Es lo que el mánager Alex Cora quería darle a Brayan Bello cuando lo movió de su apertura programada para el domingo, llevándolo de regreso al miércoles contra los Marlins.
“Creo que es mental más que cualquier otra cosa, como que lo reinicia, ¿no?”, dijo Cora antes del inicio de la serie el martes. “Trabaja en algunas cosas y luego, por otro lado, trata de ser más agresivo al principio del conteo. Así que ya veremos. Pero creo que es bueno para él. Es como reiniciar la arena y [prepararse] para mañana”.
Si la actuación de Bello en la victoria de los Red Sox por 7-2 sobre los Marlins fue una indicación, el momento de enderezar su propio rumbo dio sus frutos, aunque al principio no lo pareciera. Después de una primera entrada complicada, en la que permitió una carrera después de que tres de los primeros cuatro bateadores a los que se enfrentó conectaron sencillos, Bello se acomodó.
Bello se acomodó tanto que se ganó una ovación de pie de los fanáticos de los Red Sox que llenaron las gradas sobre el dugout visitante en el parque loanDepot cuando salió después de 6 2/3 entradas y 91 lanzamientos. Bello permitió una carrera con siete hits y una base por bolas, ponchando a siete, un gran cambio con respecto a su apertura anterior, en la que permitió siete carreras con cinco hits y tres bases por bolas en 2 1/3 entradas el 25 de junio contra Toronto.
Por supuesto, Bello recibió algo de ayuda de su ofensiva, que conectó hits para superar el déficit inicial de 1-0, contraatacando con dos carreras en la tercera, una de ellas por imparable dentro del cuadro interior del dominicano Rafael Devers, antes de aumentar la ventaja en las entradas posteriores, acentuadas con el doble de Ceddanne Rafaela con dos outs que llenó las bases en la novena. Por segunda noche consecutiva, Boston tuvo hits de dos dígitos: 13 el martes por la noche y 12 el miércoles.
Devers, quien agregó triple en cuatro veces al bate, terminó el partido con dos anotadas y dos remolcadas.
Jesús Sánchez remolcó una carrera y pegó tres indiscutibles en cuatro visitas al plato y Bryan De La Cruz se fue de 3-1 por los Marlins.
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