EL NUEVO DIARIO, CARACAS.- El Gobierno venezolano anunció este viernes el cese de su controversial criptomoneda “El Petro”, que fue lanzada hace seis años por el presidente Nicolás Maduro para evitar las sanciones financieras impuestas por Estados Unidos.
A través de su portal, la plataforma Patria, el único canal en el que la referida criptodivisa era canjeable, anunció que a partir del 15 de enero de 2024, los fondos en los monederos y billeteras de Botcoin, Litecoin y Dash serán convertidos a bolívares digitales.
“Con esta operación la Plataforma Patria cerrará los monederos y billeteras en criptomonedas para concentrar los recursos tecnológicos en los monederos principales”, agregó la plataforma.
De acuerdo a una publicación de la agencia AFP, el Gobierno declinó comentar sobre el inminente cierre del programa.
Sobre el Petro
El Petro, respaldado por las vastas reservas petroleras de Venezuela y sus recursos minerales, se presentó en 2018 con la promesa de brindar nuevas formas de financiamiento internacional. Sin embargo, su uso fue limitado desde el principio y se centró principalmente en transacciones gubernamentales, como el pago de impuestos.
Maduro, en un intento por anclar la economía a la criptomoneda, vinculó el valor del Petro al precio de un barril de crudo venezolano, en ese entonces, 60 dólares. A pesar de sus esfuerzos, la falta de confianza en el emisor y problemas técnicos, incluidos retrasos en la cadena de bloques, llevaron a la criptomoneda a una existencia marginal.
Según la agencia AFP, el uso del petro siempre fue escaso y, aunque Maduro al principio calificó la iniciativa como «un éxito», estuvo básicamente restringida a operaciones con el Estado, como el pago de impuestos.
Más que como una criptomoneda, el petro funcionó en la práctica como una referencia de valor en medio de la crónica inflación y la constante depreciación del bolívar.
Las multas de tránsito, por ejemplo, se establecían en petros, aunque no podían pagarse en ‘criptos’; y el gobierno obligó a los bancos a presentar saldos en bolívares y petros.
En la Plataforma Patria, los usuarios recibían transferencias en petros y podían canjearlos a bolívares a través de un sistema de subastas, el único disponible.
La muerte oficial del Petro se selló con el escándalo de corrupción en la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) en mayo del año pasado, que involucró a responsables de la Superintendencia Nacional de Criptoactivos (Sunacrip). La junta reestructuradora de la Sunacrip decidió apagar definitivamente lo que quedaba del Petro.
Sin dar mayores explicaciones, Maduro ha dejado de hacer referencia a la criptomoneda estatal en sus apariciones públicas.
El uso de criptomonedas era alto en Venezuela mucho antes de la apuesta gubernamental por el petro, pues los criptoactivos fueron vistos como refugio frente a la inflación. Según una encuesta presentada en 2022 en la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Comercio y el Desarrollo, 10,3% de los venezolanos poseen criptos, frente a 8,3% de los estadounidenses y 5% de los británicos.
El minado (proceso por el cual se crean nuevas unidades de criptomonedas a través de algoritmos generados por computadoras) también es alto en este país, por los bajos costos de la energía eléctrica