EL NUEVO DIARIO, LA PAZ. – El expresidente de Bolivia, Evo Morales, se manifestó este martes en contra de los magistrados del país y dijo que no gozan de credibilidad, al señalar de «inconstitucional» la prórroga del mandato del Tribunal Constitucional Plurinacional y un fallo dictado que prohíbe la reelección presidencial indefinida.
Con la promulgación de la Sentencia Constitucional 1010/2023 del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), el 30 de diciembre de 2023, que indica que «la reelección presidencial indefinida no existe y no es un derecho humano», Morales estaría inhabilitado para postularse como candidato a la presidencia boliviana en las elecciones de 2025.
El sector afín al exmandatario exigió la renuncia de los magistrados y que se convoque a elecciones judiciales. Señalaron que de no cumplirse lo pedido para este viernes, realizarán un paro nacional y bloqueo de carreteras la próxima semana
«El sometimiento de la justicia de Bolivia al poder político y la corrupción de sus administradores en niveles alarmantes ha provocado que la ciudadanía esté desamparada totalmente de una justicia que debía proteger los intereses de la población», escribió Morales en sus redes sociales.
También urgió a una convocatoria inmediata para elecciones judiciales, y agregó que «no se puede permitir que sea precisamente la justicia la que haya dado un golpe a la Constitución y la democracia».
Los comicios para el cambio de autoridades judiciales debieron realizarse en 2023, pero el proceso para convocarlos fue infructuoso en el Parlamento boliviano, de mayoría oficialista
Ante el atraso de las elecciones, los magistrados del TCP decidieron prorrogar su mandato y defendieron la medida aduciendo evitar un «vacío de poder».
Mientras tanto, la viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, señaló que Morales «está intentando convulsionar el país» con la convocatoria al paro nacional, pero que la salida de la situación es que los senadores y diputados de la Asamblea Legislativa se sienten y que busquen consensos para trabajar en una convocatoria para las elecciones judiciales
Evo Morales y el presidente boliviano, Luis Arce, ambos del partido oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), se encuentran distanciados por diferencias en el manejo del Estado. Arce declaró a Morales como su «principal opositor» el mes pasado.