El portavoz también acusó a las tropas israelíes de bombardear la carretera principal que une varios campamentos de refugiados en la zona central del enclave “para obstaculizar el acceso de las ambulancias y de la defensa civil a los distintos lugares”.
“Hacemos un llamado a todos los países del mundo libre a presionar a la ocupación criminal para detener la guerra de genocidio cometida por el ejército de ocupación contra nuestro pueblo palestino y contra niños, mujeres y civiles”, indicó Qudra.
Al menos 20.400 muertos desde que se inició la ofensiva
Los intensos bombardeos israelíes en dos meses y medio de ofensiva se han cobrado la vida de al menos 20.400 gazatíes – el setenta por ciento civiles, incluidos más de 8.000 niños – y causado más de 54.000 heridos; además de 7.500 cuerpos que se estiman atrapados bajo los escombros, según el último recuento del Ministerio de Sanidad.
“La horrible masacre criminal sionista en el campo de refugiados de Maghazi (…) es un nuevo crimen de guerra como una extensión de la guerra de exterminio que está cometiendo contra niños y civiles indefensos”, aseguró en un comunicado el movimiento político de Hamás, que gobierna de facto la Franja desde 2007.
Sobre el ataque a Maghazi, fuentes médicas del hospital Mártires de Al Aqsa, de referencia en la zona centro, indicaron que algunos cuerpos de las víctimas llegaron fragmentados como resultado de la artillería y las redadas que tuvieron como objetivo varias casas del campamento.
Ese hospital también recibió decenas de muertos y heridos de varios ataques sobre los campos de refugiados de Bureij y Nuseirat, también en el centro del enclave, donde las tropas israelíes ordenaron su evacuación el pasado viernes forzando el desplazamiento bajo las bombas de miles de personas.
“La artillería de ocupación bombardeó tierras agrícolas en Nuseirat, hiriendo a varios ciudadanos, mientras que otros murieron y resultaron heridos en otro bombardeo dirigido a la región meridional”, informó la agencia oficial palestina Wafa, que también reportó ataques de artillería sobre viviendas civiles en la ciudad de Deir al balah, también en la zona centro.
Además, los bombardeos no han cesado en todo el resto del enclave, incluyendo uno en Jan Yunis, en el sur, que ha dejado al menos 22 muertos.
El director del hospital Nasser, el principal de Jan Yunis, informó de que llegaron personas con heridas críticas que podrían estar causadas por “armas prohibidas internacionalmente”, indicó Wafa.
Ataques en las ciudades de Beit Hanun y Yabalia
En la mitad norte del enclave, las ciudades de Beit Hanun y Yabalia fueron las más castigadas por los ataques, tanto aéreos como de artillería,
Los equipos de defensa civil en Gaza informaron de que en el norte, prácticamente arrasado por los combates, hay centenares de cuerpos en descomposición debido a las dificultades para llegar a ellos, especialmente en el campo de refugiados de Yabalia, que ha sufrido una dura ofensiva israelí.
El Ejército israelí aseguró haber desmantelado ayer un cuartel militar subterráneo en el campo de Yabalia, desde el que además partía una extensa red de túneles de Hamás.
“Las tropas de ocupación dispararon balas reales directamente contra un grupo de ciudadanos al sur de la ciudad de Gaza, mientras intentaban regresar a sus hogares en el norte de la Franja, hiriendo a varios de ellos”, agregó Wafa.
El sistema de salud en el sur, donde Israel centra ahora su ofensiva, “está colapsando”, mientras que en la mitad norte no queda ya ningún hospital en funcionamiento, denunció el Ministerio de Sanidad.
Yihad Islámica rechaza el intercambio de prisioneros sin el cese de ataques contra Gaza
La Yihad Islámica reiteró su rechazo a cualquier intercambio de prisioneros y rehenes sin que antes se detengan de forma permanente los ataques de Israel contra la Franja de Gaza y mientras las fuerzas israelíes sigan en el enclave palestino, informó esta noche la organización.
“No se habla de la cuestión del intercambio de prisioneros y detenidos a menos que se detenga la agresión contra Gaza y las fuerzas israelíes se retiren”, indicó el subsecretario general de la Yihad Islámica, Mohamed al Hindi, tras una reunión con el Servicio General de Inteligencia de Egipto en El Cairo.
En el encuentro, la delegación de este movimiento palestino, encabezada por el secretario general, Ziad Najalah, evaluó diferentes posiciones y discutió la propuesta de Egipto, si bien no trascendió su consideración sobre ella.
Egipto, país mediador en el conflicto entre Israel y Hamás, planteó ayer al grupo islamista un plan con tres ejes que incluye un alto el fuego de “dos o tres semanas” a cambio de la liberación de 40 rehenes israelíes, formar un gobierno tecnocrático en la Franja y alcanzar un cese total de la guerra, un acuerdo integral de intercambio de prisioneros y rehenes entre ambas partes y la retirada de Israel de Gaza.
Asimismo, Al Hindi insistió en que “el futuro de Gaza no puede separarse del futuro de Cisjordania” y afirmó que “la resistencia posee capacidades que le permiten continuar luchando durante un largo período, más largo de lo que todos esperan”.